GIRASOL
GIRASOL
pueden medir tres metros de alto. Los tallos son generalmente
erectos e hispidos. La mayoría de las hojas son caulinares, alternas,
pecioladas, con base cordiforme y bordes aserrados. La cara inferior es
usualmente más o menos hispida, a veces glandulosa y la superior glabra. El involucro
es hemiesférico o anchado y mide 15-40 mm y hasta más de 20 cm. Las brácteas
involucrales en número de 20-30, y hasta más de 100, ovaladas a lanceoladas
–brutalmente estrechadas en el ápice– nerviadas longitudinalmente, con el borde
generalmente hispido o hirsuto, al igual que sus caras exteriores, raramente
son glabras. Receptáculo con escamas centimétricas
tri-dentadas, con el diente mediano más grande y la punta hirsuta. Las lígulas,
en número de 15-30, y hasta 100, de color amarillo a anaranjado hasta rojas,
miden 2,5-5 cm; los flósculos, de 150 hasta 1000, del mismo color con los estambres
pardos-rojizos. Los frutos son aquenios ovalados, algo truncados en la base, de 3-15 mm
de largo, glabros o casi, estriados por finísimos surcos verticales, de color
oscuro, generalmente casi negras - aunque pueden ser también blanquecinas,
rojizas, de color miel o bien moteados o con bandas longitudinales más claras
Botanica.
Perteneciente a la familia Asteraceae, cuyo nombre científico es Helianthus annuus. Se
trata de una planta anual, con un desarrollo vigoroso en todos sus órganos.
Dentro de esta especie existen numerosos tipos o subespecies cultivadas como plantas ornamentales, oleaginosas y forrajeras.
Dentro de esta especie existen numerosos tipos o subespecies cultivadas como plantas ornamentales, oleaginosas y forrajeras.
-Raíz:
está formada por una raíz pivotante y un sistema de
raíces secundarias de las que nacen las terciarias que exploran el suelo en
sentido horizontal y vertical.
Normalmente la longitud de la raíz principal sobrepasa la altura del tallo.
La raíz profundiza poco, y cuando tropieza con obstáculos naturales o suelas de labor desvía su trayectoria vertical y deja de explorar las capas profundas del suelo, llegando a perjudicar el desarrollo del cultivo y por tanto el rendimiento de la cosecha.
Normalmente la longitud de la raíz principal sobrepasa la altura del tallo.
La raíz profundiza poco, y cuando tropieza con obstáculos naturales o suelas de labor desvía su trayectoria vertical y deja de explorar las capas profundas del suelo, llegando a perjudicar el desarrollo del cultivo y por tanto el rendimiento de la cosecha.
-Tallo:
es de consistencia semileñosa y maciza en su interior,
siendo cilíndrico y con un diámetro variable entre 2 y 6 cm., y una altura
hasta el capítulo entre 40cm. y 2m.
La superficie exterior del tallo es rugosa, asurcada y vellosa; excepto en su base.
En la madurez el tallo se inclina en la parte terminal debido al peso del capítulo.
La superficie exterior del tallo es rugosa, asurcada y vellosa; excepto en su base.
En la madurez el tallo se inclina en la parte terminal debido al peso del capítulo.
-Hojas:
son alternas,
grandes, trinervadas, largamente pecioladas, acuminadas, dentadas y de áspera
vellosidad tanto en el haz como en el envés.
El número de hojas varía entre 12 y 40, según las condiciones de cultivo y la variedad.
El color también es variable y va de verde oscuro a verde amarillento.
-Inflorescencia: el receptáculo floral o capítulo puede tener forma plana, cóncava o convexa. El capítulo es solitario y rotatorio y está rodeado por brácteas involucrales.
El número de flores varía entre 700-3000 en variedades para aceite, hasta 6000 o más en variedades de consumo directo.
Las flores del exterior del capítulo (pétalos amarillos) son estériles, están dispuestas radialmente y su función es atraer a los insectos polinizadores.
Las flores del interior están formadas por un ovario inferior, dos sépalos, una corola en forma de tubo compuesta por cinco pétalos y cinco anteras unidas a la base del tubo de la corola.
La polinización es alógama, siendo la abeja melífera el principal insecto polinizador, cuya presencia repercute directamente en la fecundación y fructificación.
Para favorecer la polinización se deben instalar 2 ó 3 colmenas por hectárea.
El número de hojas varía entre 12 y 40, según las condiciones de cultivo y la variedad.
El color también es variable y va de verde oscuro a verde amarillento.
-Inflorescencia: el receptáculo floral o capítulo puede tener forma plana, cóncava o convexa. El capítulo es solitario y rotatorio y está rodeado por brácteas involucrales.
El número de flores varía entre 700-3000 en variedades para aceite, hasta 6000 o más en variedades de consumo directo.
Las flores del exterior del capítulo (pétalos amarillos) son estériles, están dispuestas radialmente y su función es atraer a los insectos polinizadores.
Las flores del interior están formadas por un ovario inferior, dos sépalos, una corola en forma de tubo compuesta por cinco pétalos y cinco anteras unidas a la base del tubo de la corola.
La polinización es alógama, siendo la abeja melífera el principal insecto polinizador, cuya presencia repercute directamente en la fecundación y fructificación.
Para favorecer la polinización se deben instalar 2 ó 3 colmenas por hectárea.
-Fruto:
es un aquenio de tamaño comprendido entre 3 y 20 mm. de
largo; y entre 2 y 13 mm. de ancho.
El pericarpio es fibroso y duro, quedando pegado a la semilla. La membrana seminal crece con el endospermo y forma una película fina que recubre al embrión y asegura la adherencia entre el pericarpio y la semilla.
El pericarpio es fibroso y duro, quedando pegado a la semilla. La membrana seminal crece con el endospermo y forma una película fina que recubre al embrión y asegura la adherencia entre el pericarpio y la semilla.
IMPORTANCIA ECONÓMICA Y DISTRIBUCIÓN
GEOGRÁFICA.
El girasol es una planta típicamente oleaginosa teniendo
un papel fundamental en la alimentación humana y además como planta forrajera.
Es una de las plantas herbáceas de extracción de aceite para consumo humano más cultivadas en el mundo.
Es un cultivo en expansión con un incremento medio anual bastante estable en los últimos años.
A continuación se muestran los datos de superficies, producciones y comercio internacional en diferentes países.
Es una de las plantas herbáceas de extracción de aceite para consumo humano más cultivadas en el mundo.
Es un cultivo en expansión con un incremento medio anual bastante estable en los últimos años.
A continuación se muestran los datos de superficies, producciones y comercio internacional en diferentes países.
REQUERIMIENTOS EDAFOCLIMÁTICOS.
Suelo.
Es un cultivo poco exigente en el tipo de suelo, aunque
prefiere los arcillo-arenosos y ricos en materia orgánica, pero es esencial que
el suelo tenga un buen drenaje y la capa freática se encuentre a poca
profundidad.
El girasol es
muy poco tolerante a la salinidad, y el contenido de aceite disminuye cuando
esta aumenta en el suelo.
En suelos neutros o alcalinos la producción de girasol no se ve afectada, ya que no aparecen problemas de tipo nutricional.
Es una de las plantas con mayor capacidad para utilizar los residuos químicos aportados por las explotaciones anteriores, propiciando un mejor aprovechamiento del suelo, por tanto la rentabilidad de las explotaciones agrícolas se ve incrementada.
En suelos neutros o alcalinos la producción de girasol no se ve afectada, ya que no aparecen problemas de tipo nutricional.
Es una de las plantas con mayor capacidad para utilizar los residuos químicos aportados por las explotaciones anteriores, propiciando un mejor aprovechamiento del suelo, por tanto la rentabilidad de las explotaciones agrícolas se ve incrementada.
Temperatura
Es un factor
muy importante en el desarrollo del girasol, adaptándose muy bien a un amplio
margen de temperaturas que van desde 25-30 a 13-17ºC.
Si la temperatura es muy alta durante la floración y llenado del grano, provoca una importante pérdida en la producción final, tanto en peso como en contenido graso.
La temperatura óptima del suelo para la siembra varía entre 8 y 10ºC.
Si la temperatura es muy alta durante la floración y llenado del grano, provoca una importante pérdida en la producción final, tanto en peso como en contenido graso.
La temperatura óptima del suelo para la siembra varía entre 8 y 10ºC.
Fotoperiodo y luz.
Las diferencias
en cuanto a la aparicición de hojas, fecha de floración y a la duración de las
fases de crecimiento y desarrollo son atribuidas al fotoperiodo.
Durante la fase reproductiva el fotoperiodo deja de tener influencia y comienza a tener importancia la intensidad y la calidad de la luz, por tanto un sombreo en plantas jóvenes produce un alargamiento del tallo y reduce la superficie foliar.
Durante la fase reproductiva el fotoperiodo deja de tener influencia y comienza a tener importancia la intensidad y la calidad de la luz, por tanto un sombreo en plantas jóvenes produce un alargamiento del tallo y reduce la superficie foliar.
Humedad.
Durante la
época de crecimiento activo y sobre todo en el proceso de formación y llenado
de las semillas el girasol consume importantes cantidades de agua.
El consumo de agua será máximo durante el periodo de formación del capítulo, ya que el girasol toma casi la mitad de la cantidad total de agua necesaria.
La secreción de néctar está influida por la humedad atmosférica durante la floración
El consumo de agua será máximo durante el periodo de formación del capítulo, ya que el girasol toma casi la mitad de la cantidad total de agua necesaria.
La secreción de néctar está influida por la humedad atmosférica durante la floración
Siembra.
La época de siembra es variable y dependiente de las
características climatológicas de cada región.
Los sistemas de siembra de primavera y de invierno se caracterizan por aprovechar las posibilidades termohídricas que desarrolla el cultivo del girasol.
La principal ventaja de la siembra invernal es el incremento de la producción, tanto de aquenios como de grasa; pero el riesgo de heladas y la competencia de las malas hierbas se incrementa.
La germinación de las semillas de girasol depende de la temperatura y de la humedad del suelo, siendo la temperatura media de 5ºC durante 24 horas.
La profundidad de siembra se realiza en función de la temperatura, humedad y tipo de suelo.
En zonas húmedas con primaveras cálidas con suelos pesados y húmedos, la profundidad de siembra es de 5 a 6 cm.
En zonas con primaveras secas con suelos ligeros y poca humedad, la profundidad de siembra es de 7 a 9 cm.
Si el terreno es ligero y mullido la profundidad de siembra es mayor, al contrario que ocurre si el suelo es pesado.
El adelanto de la siembra reduce el volumen total de agua percolada al incrementarse el periodo de coincidencia de lluvia con el cultivo ya establecido.
La época de siembra influye directamente en el contenido en aceite de los aquenios, siendo este superior si las siembras son tempranas.
Las plantas que proceden de siembras superficiales germinan y florecen antes que las procedentes de siembras profundas.
Los sistemas de siembra de primavera y de invierno se caracterizan por aprovechar las posibilidades termohídricas que desarrolla el cultivo del girasol.
La principal ventaja de la siembra invernal es el incremento de la producción, tanto de aquenios como de grasa; pero el riesgo de heladas y la competencia de las malas hierbas se incrementa.
La germinación de las semillas de girasol depende de la temperatura y de la humedad del suelo, siendo la temperatura media de 5ºC durante 24 horas.
La profundidad de siembra se realiza en función de la temperatura, humedad y tipo de suelo.
En zonas húmedas con primaveras cálidas con suelos pesados y húmedos, la profundidad de siembra es de 5 a 6 cm.
En zonas con primaveras secas con suelos ligeros y poca humedad, la profundidad de siembra es de 7 a 9 cm.
Si el terreno es ligero y mullido la profundidad de siembra es mayor, al contrario que ocurre si el suelo es pesado.
El adelanto de la siembra reduce el volumen total de agua percolada al incrementarse el periodo de coincidencia de lluvia con el cultivo ya establecido.
La época de siembra influye directamente en el contenido en aceite de los aquenios, siendo este superior si las siembras son tempranas.
Las plantas que proceden de siembras superficiales germinan y florecen antes que las procedentes de siembras profundas.
Se trata de una planta que aprovecha el agua de forma
mucho más eficiente en condiciones de escasez.
Su sistema radicular extrae el agua del suelo a una profundidad a la que otras especies no pueden acceder.
El girasol adapta muy bien su superficie foliar a la disponibilidad de agua en el medio.
Es un cultivo de secano, pero responde muy bien al riego incrementando el rendimiento final.
Si se realiza un subsolado profundo se facilita la penetración del agua, el drenaje y la aireación del terreno, mejorando de forma considerable el resultado del riego.
Requiere poca agua hasta unos diez días después de la aparición del capítulo donde se aplicará 50-60 litros por metro cuadrado.
A partir de este momento las necesidades hídricas aumentan considerablemente y se mantienen hasta unos 25-30 días después de la floración aportando un segundo riego de 60-80 litros por metro cuadrado en plena floración.
Su sistema radicular extrae el agua del suelo a una profundidad a la que otras especies no pueden acceder.
El girasol adapta muy bien su superficie foliar a la disponibilidad de agua en el medio.
Es un cultivo de secano, pero responde muy bien al riego incrementando el rendimiento final.
Si se realiza un subsolado profundo se facilita la penetración del agua, el drenaje y la aireación del terreno, mejorando de forma considerable el resultado del riego.
Requiere poca agua hasta unos diez días después de la aparición del capítulo donde se aplicará 50-60 litros por metro cuadrado.
A partir de este momento las necesidades hídricas aumentan considerablemente y se mantienen hasta unos 25-30 días después de la floración aportando un segundo riego de 60-80 litros por metro cuadrado en plena floración.
Abonado.
Debido a la elevada capacidad del sistema radicular del
girasol para extraer nutrientes, este no es muy exigente en cuanto a abonado.
Las dosis de abono se ajustarán en función de los elementos nutritivos del suelo y del régimen de precipitaciones y de riegos.
La absorción de nutrientes se concentra en los primeros estadios de desarrollo de la planta.
Es un cultivo muy sensible a la toxicidad por aluminio, dificultando su desarrollo radicular y como consecuencia en la parte aérea aparecen síntomas de estrés hídrico o carencia de otros nutrientes como fósforo o magnesio.
Las dosis de abono se ajustarán en función de los elementos nutritivos del suelo y del régimen de precipitaciones y de riegos.
La absorción de nutrientes se concentra en los primeros estadios de desarrollo de la planta.
Es un cultivo muy sensible a la toxicidad por aluminio, dificultando su desarrollo radicular y como consecuencia en la parte aérea aparecen síntomas de estrés hídrico o carencia de otros nutrientes como fósforo o magnesio.
-Nitrógeno.
El déficit de nitrógeno es una de las causas del descenso de los rendimientos en el cultivo del girasol.
Es un elemento necesario para el crecimiento, diferenciación y desarrollo de sus órganos.
Una dosis de 80-100 kg/ha contribuye a aumentar la producción en un 15-20%.
El síntoma de su deficiencia es una clorosis general en cualquier fase de su desarrollo, afectando de igual modo a hojas tanto jóvenes como viejas.
El exceso de nitrógeno reduce de forma sustancial el aceite de la semilla, pero sin embargo incrementa el contenido en proteínas.
-Fósforo.
Durante la floración las necesidades de fósforo son máximas, además su aporte no disminuye el contenido de aceite de las semillas.
El déficit de fósforo repercute directamente tanto en las primeras fases de desarrollo del cultivo como en la formación y llenado de los aquenios.
Los síntomas de deficiencia se manifiestan por una reducción del crecimiento y necrosis en las hojas más bajas.
La fertilización con superfosfato se aplicará en otoño con dosis de 40-80 kg/ha.
-Potasio.
El girasol es una planta que consume elevadas cantidades de potasio, sobre todo antes de la floración.
Como dosis orientativa se recomienda aplicar 1oo kg/ha de potasio (k20)
El potasio actúa como regulador en la asimilación, transformación y equilibrio interno de la planta, contribuyendo de forma activa a su resistencia frente a la sequía.
Los síntomas de carencia se presentan a en las hojas más bajas, mostrando un color amarillo con manchas necróticas.
-Boro.
Este micronutriente es esencial para la división celular de los ápices radiculares, por tanto su deficiencia afecta al desarrollo de las raíces.
Los síntomas de deficiencia aparecen en la época de floración, ya que el capítulo se deforma y las hojas superiores se vuelven quebradizas, malformadas y necróticas con un color bronceado.
Se aplicará boro a razón de 0.5-1 kg en 200 litros de agua por hectárea con un tratamiento foliar.
-Métodos químicos.
Para combatir las malas hierbas es mucho más rentable el empleo de herbicidas; si se emplean herbicidas fenoxiacéticos, se realizarán bajo condiciones climáticas favorables, manteniendo además una zona de protección.
El girasol es un cultivo muy sensible a la atrazina y a la simazina, sobre todo si la siembra se realiza en un terreno tratado el año anterior con elevadas dosis de estos productos.
. VARIEDADES.
Las variedades se clasifican según el rendimiento de los
aquenios, el contenido total de aceite, el porcentaje de ácido oleico, la
inmunidad al Mildiu y al jopo, la duración del ciclo y la altura de la planta.
PLAGAS
-Gusanos grises (Agrotis segetum, A. exclamationis y A. ypsilon).
-Gusanos grises (Agrotis segetum, A. exclamationis y A. ypsilon).
Las orugas tienen el cuerpo verdoso y la cabeza negra con una longitud entre 10-50mm., situándose al pie de las plantas atacadas.
Las larvas atacan al girasol desde la germinación de las semillas hasta que las plantas tienen unos 15 cm. de altura.
Producen daños en la raíz y en la base del tallo, pudiendo llegar a cortar la planta, éstas se marchitan y el crecimiento se detiene.
*Control:
-La siembra temprana reduce el riesgo de ataque.
-El empleo de cebos: 1 kg deTriclorfon + 20 kg de salvado + 500 g de azúcar por hectárea.
-Las pulverizaciones con insecticidas: Triclorfon, Piretroides o Lindano; aplicados sobre todo el terreno o sobre la línea de siembra.
-En zonas muy atacadas por esta plaga se recomienda la desinsectación del suelo con productos clorados y fosfóricos.
-Gusanos de alambre (Agriotes lineatus).
Las hembras depositan los huevos sobre la base de las
plantas, emergiendo poco después unas larvas rígidas de 1.5 cm. de color
amarillo-anaranjado, con forma cilíndrica alargada.
Destruyen la semilla enterrada antes de que germine, alimentándose de su contenido y dejando la cáscara.
Destruyen la semilla enterrada antes de que germine, alimentándose de su contenido y dejando la cáscara.
*Control:
-Aplicar tratamientos con Lindano en dosis de 1-1.5 kg/ha. e insecticidas granulados sobre la línea de siembra.
-Se efectuarán espolvoreos con productos clorados y fosforados.
-De forma preventiva se practicará la desinsectación del suelo con Aldrin en dosis de 3-4 kg/ha.
ENFERMEDADES.
-Mildiu del girasol (Plasmopara helianthi).
En condiciones de humedad relativa es elevada (90-100%) y la temperatura está entre 12 y 22ºC, en la superficie de la planta se producen los órganos reproductores del hongo, que se esparcen llevando la infección a través del aire y del suelo a otras plantas.
Los síntomas se manifiestan por un enanismo en el girasol, las hojas se tornan de un verde pálido desde la base hasta el ápice de las hojas.
*Control:
-Emplear semillas híbridas certificadas tratadas con anticriptogámicos.
-Tratar las semillas con funguicidas específicos, como el Metalaxil, para controlar las infecciones que se originan en el suelo y en las que pudieran provenir de las semillas infectadas.
-Podredumbre carbonosa de raíz y tallo (Macrophomina phaseolina)
Es un hongo polífago y termófilo, para su desarrollo es necesario que el girasol padezca estrés hídrico.
Generalmente son las plantas adultas y en estado de maduración las que resultan atacadas, produciéndoles la muerte prematura y el ennegrecimiento de sus órganos.
*Control.
-Se realizarán prácticas agronómicas y estrategias de cultivo encaminadas a evitar el estrés hídrico..
-Verticilosis (Verticilium dahliae).
Es un hongo que vive en el suelo o sobre los residuos de plantas atacadas, donde resiste de cuatro a nueve años.
Desde el suelo penetran por la raíz en el tallo ocasionando el marchitamiento de toda la planta.
La reacción al ataque de este hongo depende del tipo de variedad de girasol.
*Control.
-Se emplearán híbridos resistentes como medida de prevención.
-Se recomienda alternar el girasol con gramíneas resistentes y controlando las malas hierbas.
-Podredumbre gris (Botrytis cinerea).
Este hongo constituye una amenaza permanente en el cultivo del girasol, debido a la existencia de su forma conídica.
Su ciclo de vida comienza a principios de a primavera en los residuos vegetales existentes en el suelo.
El ataque se manifiesta desde las plántulas, éstas se decoloran, las hojas pierden su turgencia y se retuercen, ablandan y pudren.
Si las condiciones climáticas favorecen el desarrollo del hongo, las plantas se cubren de un polvo gris, formado por los conidióforos y conidios del hongo.
*Control.
-Aplicar tratamientos químicos con Diclofluanida o Tiofanato-metil Maneb.
Jopo (Orobanche cumana).
Las plantas de jopo florecen y maduran a la misma vez que el girasol. Los jopos carecen de clorofila, alcanzan una altura variable en su único tallo que tiene escamas y brácteas en cuyas axilas se forman flores coloreadas, que dan lugar a cápsulas que al madurar liberan miles de pequeñas semillas.
Las semillas de jopo germinan en el suelo en respuesta a los exudados radicales del girasol y los tubos germinativos penetran en el córtex del girasol estableciendo conexiones vasculares, que permiten la alimentación y desarrollo de los bulbos de jopo.
Las plantas atacadas forman capítulos pequeños, y con la mayoría de las semillas secas.
Si el ataque es muy intenso, las plantas parasitadas se marchitan ya que se incrementa la transpiración y disminuyen las reacciones de oxi-reducción.
*Control:
-Sembrar híbridos resistentes al jopo.
-Los tallos del jopo aparecidos en los cultivos de girasol se deben quemar antes de la floración del jopo, para evitar la formación de semillas.
-Respetar la rotación del cultivo cada seis-siete años.
-Elegir como plantas precedentes: cereales, guisantes, judías y soja; y evitar tomate y tabaco.
-Realizar labores profundas en otoño.
Usos
Hay distintos tipos de girasoles: oleaginosos, de
confitura o confitería, de alto contenido de ácido oleico y ornamentales.
El girasol contiene hasta un 58 % de aceite
en su fruto, aceite que se utiliza para cocinar, y también para producir biodiésel.
El aceite de girasol virgen —obtenido del prensado
de las pipas—, aunque no posee las cualidades del aceite de
oliva, sí posee una cantidad cuatro veces mayor de vitamina E
natural que este.
El "orujo" que queda después de la extracción del aceite se utiliza como alimento para el ganado.
El "orujo" que queda después de la extracción del aceite se utiliza como alimento para el ganado.
Frutos
y semillas de girasol o pipas
Los frutos del girasol, las populares «pipas», suelen ser
consumidas tras un leve tostado y, en ocasiones, un leve salado; se consideran
muy saludables ya que, al igual que el aceite de girasol,
son ricas en alfa-tocoferol (vitamina E
natural) y minerales